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POR SI ESTAMOS DE LOS NERVIOS

En estos tiempos en los que nos "agarramos" por cualquier cosa y montamos una escena porque el niño ha derramado el colacao, no nos vendría mal echar mano a la medicina natural para salir adelante ante esas pequeñas angustia que nos atenazan.

No quisiera frivolizar y quitar importancia a los auténticos problemas nerviosos , que los habrá y que tendrán su tratamiento farmacológico por parte del psiquiatra.Pero nos vamos a ocupar de esas afecciones nerviosas no cuantificables por la medicina oficial y que sin lugar a dudas nos producen nerviosismo, ansiedad, insomnio...

Numerosas plantas y alimentos nos pueden ayudar a salir del paso. Vamos a ellas:

La más conocida es la TILA. ¿Quién no ha echado mano a una tilita después de un mal rato?Los principios activos de la tila son conocidos desde hace mucho tiempo y puede decirse que es uno de los remedios vegetales más empleados para calmar los nervios.Lo que poca gente sabrá es que es una buena aliada para los problemas respiratorios por su acción emoliente y antiespasmódica.Por eso está indicada en catarros bronquiales, gripe o tos rebelde. Además es muy útil en resfriados porque hace sudar y elevar un poquito la temperatura, lo que beneficia al organismo ayudando a "echar fuera" los "bichitos" indeseables.

La VALERIANA se usa como somnífero desde el Renacimiento. Es curioso que esta planta, usada como relajante en humanos, puede llegar a poner eufóricos a los gatos, que se frotan contra ella con deleite y gustirrinín . Y no se entiende porque huele ...fatal.Pero es que a los gatos debe gustarle el olor a pies sudados. Pero eso sí: si uno quiere dormir de un tirón...infusión de valeriana, pero mezclada con alguna otra planta menos "olorosa".

Cuando nuestras abuelas sufrían un desmayo o los suspiros se le escapaban de sus bocas de fresa,echaban mano de unas botellitas de "agua del Carmen" que entre otras cosas estaba compuesta por MELISA... y una gran cantidad de alcohol. Avicena, médico árabe del siglo XI, decía que la melisa " tenía la admirable propiedad de alegrar y confortar el corazón".Fueron los carmelitas descalzos los que inventaron y fabricaron la famosa Agua del Carmen que ha sido remedio popular contra desfallecimientos, síncopes o crisis nerviosas. Nos queda la duda si nuestras abuelitas tomaban el agua del Carmen por el gustito a ginebra, mal visto en aquellos tiempos, o por la maravillosa melisa.

Fuera de bromas, hay que decir que la planta de la melisa tomada en infusión es buena para aliviar "esos nervios metidos en el estómago", dolores menstruales, dolor de gases intestinales e insomnio.

No nos olvidemos de la LAVANDA, que puesta en el baño es capaz de dejar la mar de tranquilitos a los niños...y a los adultos. Y unas gotitas de esencia de lavanda en la almohada nos dejará listos para un sueño reparador.

También podríamos acudir a la PASIFLORA o Pasionaria, una planta americana cuya flor cautivó a los europeos que viajaron a América. En el siglo IXX se descubrió que tenía un efecrto sedante en sus hojas y flores.Según la Enciclopedia de las plantas medicinales del doctor Pamplona Roger, es la planta ideal para los que se encuentran sometidos a tensión nerviosa. Según el Diccionario de las plantas que curan de Larousse, la pasiflora "es el regalo que nos viene del antiguo imperio de los aztecas y es la planta de la que nuestra civilización actual está más necesitada".

Pero la planta que más eficaz resulta para la ansiedad, es el ESPINO BLANCO. De hecho es la planta ´con más efecto ansiolítico que se conoce. Muy útil para ese "pellizco" que suele cogerse en el estómago, a veces sin causa aparente. Reguladora de la tensión, tanto si es alta o baja y tiene una propiedad que otras plantas no tienen: además de quitar la ansiedad y regular el ritmo cardiaco, es capaz de bajar la tensión mínima , sin afectar a la máxima.

Una planta menos conocida para relajarnos es el LÚPULO. El naturalista romano PLINIO bautizó esta planta con ese nombre "porque se adueña de los campos como un lobo, es decir en latín lupus.Desde la edad media se utiliza la "lupulina" para conservar y aromatizar la cerveza y desde entonces se le han descubierto numerosas propiedades.Esta planta la forman además de las hojas, unos conos en los que se descubrió una esencia con efecto sedante y somnífero.Su uso,además de para relajar, se popularizó en la Inglaterra victoriana, como ANAFRODISIACO, es decir para evitar la hiperexcitación sexual en los jóvenes de entonces.

Se cuenta, que en palacio se rellenaban las almohadas de los sirvientes de ambos sexos, con conos de lúpulo para evitar el trasiego de éstos por los pasillos, en las madrugadas inglesas

Resumiendo, son muchas las plantas que nos ayudarían en estos tiempos de estres al que nos somete la vida cotidiana.Igualmente, cambiando nuestra forma de comer, también conseguiríamos estar más relajados. Por si no le gustan las infusiones y prefiere corregir su insomnio, ansiedad o nerviosismo, con alimentos que le vengan bien, vamos a ello:

Lechuga, nueces, miel, frutos secos, germen de trigo, remolacha cocida o levadura de cerveza, le ayudarán si los toma en la cena.

Pero a veces los problemas nos los llevamos a la cama... y no dormimos.

Viene a cuento una jota aragonesa que decía: "Amores y dolores quitan el sueño. Yo, como no los tengo... me acuesto y duermo". Felices sueños.