Ya puede tener su pienso favorito en su comedero y percibir con su maravilloso olfato el mejor de mis guisos... que cuando ella quiere, cierra la boca y no come.
Seguramente, un rato antes, aprovecha su paseo por el parque para comer hierba. No cualquier hierba, sino la que ella rebusca entre las flores.
Cuando esto ocurre, digo yo que será porque ella "entiende" que su cuerpo lo necesita.
La naturaleza, con los cambios de estación, nos avisa de que necesitamos dejar atrás unas costumbres para incorporar otras nuevas.
Igual que vaciamos el armario de abrigos y jerseys de lana, deberíamos vaciar nuestro organismo de esas "pesadas prendas" que hemos ido incorporando a nuestra dieta.
Por todas partes nos dirán que es tiempo de ensaladas...claro, y eso es lo que haría cualquiera a 30 grados a la sombra. Pero convendría que echáramos "una mirada " a nuestra vesícula antes de acometer el "plan E " de Eliminación de toxinas.
Vayamos al grano , que todavía estamos a tiempo. Como no es cosa de irse al parque a mordisquear hierbas...hagámoslo civilizadamente.
Al levantarnos por la mañana, lo primero que deberíamos hacer es tomar un vaso de agua ( ojo, que no sea de la nevera).
Para aumentar el valor curativo de tan sana costumbre, en los cambios de estación, ese agua debería ser con unas gotas de limón y una cucharita de aceite. No me empiecen a poner cara de asquito, que no está tan malo el mejunje.
Pasado un ratito, hay que comerse una pieza de fruta. Sólo una, y procurando variarla cada día.
El desayuno debe llevar té ( a ser posible, verde, blanco o rojo...incluso los tres juntos ) y pan con aceite de oliva. Los que no pueden comer trigo, lo cambiamos por dos o tres tortas de arroz, calentitas en la tostadora y su aceitito. Para los amantes de las emociones fuertes, es un placer coronarlo todo con una pasadita de ajo seco molido por encima. (
En el desayuno y en el resto del día, huiremos de "la loncha".
Me explico : Nos comieron el coco con meternos derivados cárnicos en lonchas, diciendo que el "pavi-pollo" o el jamón york son lo más de lo más en las dietas "ligeras".Bien, pues es una mentira y de las gordas.Proximamente le dedicaré un espacio a eso en exclusiva. Por ahora, háganme caso, desterremos de una dieta limpiadora, la consabida lonchita...¿vale ?
Vayamos a los tentempiés (siempre me gustó esa palabra...tentempié...tentetieso...) es decir a esos picoteos entre comidas, que a veces llenamos de "porquerias digeribles" pero no recomendables. Con 3 nueces o 7 almendras, bien masticaditas, vamos listos...o un yogurcito desnatado...o una infusión...una pieza de fruta...variándolo cada dia, para darle más color a la cosa. Estos tentetiesos, son sólo a media mañana y a media tarde...y una sola vez, listillo...
Los almuerzos y las cenas, empezarán todos con algún vegetal crudo. No hace falta que sea una ensalada descomunal, que algunos empiezan a picar cosas... y se descontrolan, una cosa ligerita.Puede servir una endivia, o un tomate o un cogollito sólo...pero si quiere más, no se pase.
Después de ese aporte de "crudo" comemos un plato en el que la proteína esté presente, en pequeña cantidad, acompañada de vegetales cocinados. Es decir, que no sea carne con verduras...sino verduras con carne.
En ese plato de vegetales cocinados podemos echarle fantasía. Desde un pisto a unos campiñones al ajillo o unos pimientos fritos o unos brócolis rehogados o unas espinacas con cominos...
Y de segundo plato o acompañamiento, podemos jugar con variar cada dia, eligiendo uno entre estos : pescados, carnes, legumbres, arroz,huevo o patatas, evitando comerlos mezclados entre sí.
La proteína, en pequeñas dosis, para descargar de trabajo nuestro hígado y limpiar de purinas nuestra dieta, a fín de que el riñón esté contentito.
Llegados a este punto, usted me dirá que está comiendo así de siempre...ja ja .
Fíjese bien. Hemos eliminado TODO aquello que el hombre ha fabricado poniendo sus manazas. Hemos comido casi, casi como nuestro tatarabuelo Hemos quitado el refresco que seguro usted se tomaba en las comidas...el postre azucarado...los embutidos con todos sus conservantes...las grasas...
Y casi sin darnos cuenta, hemos comido sanito, ligero..y depurando. Nadie le dió tanto en tan poco...Una, que es genial. Y mi perra KIKA, que me inspira.
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